¿Eres de lxs que reciclan y reutilizan todo? ¿Quieres aprovechar el aceite usado dándole así una nueva vida y ayudando a reducir la contaminación?
Pues hoy en Mejincho te vamos a enseñar cómo elaborar jabón casero a base de aceite usado, de una forma muy sencilla y entretenida. Aunque el resultado puede variar ligeramente dependiendo de los aceites que usemos, a continuación te dejamos los ingredientes y las claves para que puedas comenzar.
Es importante tener en cuenta que este jabón se va a hacer a partir de aceite que (generalmente) se ha usado para cocinar, por lo que ha perdido todas sus propiedades beneficiosas para la piel. Esto sumado a las pequeñas impurezas que pueden quedar, hacen que no sea recomendable su uso en nuestro cuerpo.
Nosotrxs en Mejincho lo usamos para lavar ropa, quitar manchas incrustadas, calzado, limpiar el suelo a diario (triturándolo), muebles de madera y aún seguimos descubriendo nuevos usos. Y sí, nosotrxs lo usamos también para las manos, pero eso ya es a riesgo de cada unx. Nosotrxs te enseñamos cómo hacerlo, pero no nos responsabilizamos del uso que le des.
 | Ingredientes:
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| Jabón secado y cortado |
Es muy importante que prestemos atención a las medidas de seguridad como son los guantes, las gafas y la mascarilla. La sosa en contacto con el agua alcanza altas temperaturas, emite vapores y es muy corrosiva.
Elaboración:
- Preparamos todos los ingredientes y utensilios, nos colocamos correctamente las medidas de seguridad y comprobamos que estemos en un lugar aireado y espaciado. Esto es importante puesto que saldrán vapores de la mezcla.
- En el cubo preparado con el agua, vertemos poco a poco y sin dejar de remover la sosa cáustica. Removemos sin parar hasta que comprobemos que queda todo bien disuelto. Comenzaremos a notar la subida de temperatura.
Dejamos en un lugar fresco y aireado mientras baja la temperatura. Nos interesa que se quede sobre 40º más o menos. - Calentamos el aceite usado hasta alcanzar alrededor de 40º también.
- Una vez tengamos la sosa cáustica con el agua por un lado y el aceite por otro a una temperatura parecida, comenzamos a mezclar. Vamos echando poco a poco el aceite en el cubo donde tenemos la lejía cáustica derivada de la mezcla anterior. Vertemos mientras removemos sin parar siempre en la misma dirección.
En este punto hay quién usa una batidora, yo prefiero hacerlo a mano removiendo con paciencia. En unos 20 o 30 minutos veremos que la mezcla toma un color uniforme y comienza a espesar un poco. - En este punto agregamos un vasito de suavizante concentrado para dar el aroma que deseemos. También podemos emplear aceites aromáticos o esencias si lo preferimos. Seguimos removiendo hasta que mezcle bien.
- Una vez que ha mezclado bien el suavizante, agregamos el colorante que deseemos. En mi caso he empleado colorante mineral, se puede comprar en tiendas de manualidades o polveros (se usa para la escayola por ejemplo) y suele ser económico.
- Vertemos la mezcla sobre el molde o los moldes que queramos emplear y tras ello, los tapamos con film transparente.
- Dejamos secar unos cuatro o cinco días, notaremos que cambia el color y que endurece.
- Desmoldamos, cortamos en porciones si es necesario y lo envolvemos cuidadosamente en papel de periódico o similar (no recomiendo en plástico porque no deja evaporar).
- Pasados unos 30 a 45 días, estará curado y listo para usar.
Y con esto, ya sabes todo lo necesario para hacer tu propio jabón, ahorrando dinero y ayudando a conservar el medio ambiente. Si te animas a hacerlo, coméntanos qué tal te ha salido
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